Por Alejandro Sagredo
La ANFP ya no tendría pensado el 15 de agosto como fin de semana tentativo para reanudar la competencia local.
Desde el anuncio hecho por la Ministra de Deportes hace unos días, donde se señaló que los equipos de Primera A y Primera B que están en zona de cuarentena recibirían permisos especiales para trabajar, la Comisión Retorno fijó el fin de semana del 15 de agosto como la fecha en que los torneos se reiniciarían.
No obstante, diversas situaciones han modificado al parecer ese calendario. Una de esas situaciones es la de Curicó Unido, pues un incumplimiento del protocolo sanitario forzó a que la Asociación decidiera enviar a todo el plantel a hacer cuarentena al notificarse un caso positivo de COVID-19. Siendo esta cuarentena de al menos 14 días una interrupción abrupta al trabajo que ya hacían en cancha los “torteros», es prácticamente imposible que jueguen en dos semanas más.
Otro caso es el de San Marcos de Arica. Los “bravos» están en una de las comunas con más casos de SARS-COV2 a nivel país, pero hace unos días se desvinculó a cuatro jugadores que usaron su permiso especial que les permitía entrenar para hacer una fiesta, rompiendo todo protocolo y norma sanitaria dispuesta por las autoridades. Dicha situación podría haber resultado incluso en un castigo para el club, como una multa o la revocación de ese permiso especial para entrenar.
La alarma ante un eventual rebrote de Coronavirus por el paulatino levantamiento de medidas como la cuarentena también genera inquietud, por lo que es de esperar que la Comisión Retorno, en conjunto con la nueva directiva de la ANFP, encabezada por Pablo Milad, se pronuncien a la brevedad respecto a esta situación.