Colo-Colo se salva. Luego de un año tumultuoso, el popular ganó el partido por el descenso, en uno de los partidos más importantes de la historia alba. Por su parte, la Universidad de Concepción pierde la categoría, causando sufrimiento y desconsuelo en su gente.
El partido tuvo su momento más brillante a los 19’ del primer tiempo, cuando Pablo Solari recibe el balón en el costado derecho, gambeteando con soltura a dos defensas del “Campanil”, quienes vieron desesperanzados como el disparo albo se colaba por entre las manos del guardameta “penquista”. Era el uno a cero parcial, y a la postre, definitivo.
El resto del partido se caracterizó por avanzadas de ambas escuadras, En el primer tiempo Colo-Colo fue quien buscó, en el segundo la Universidad de Concepción intentó hacer lo propio, buscando tibiamente una igualdad que los mantuviera en la lucha por la categoría.
En eso, Cecilio Waterman tuvo la más clara para los “auriazules”, al disparar a puerta luego de una gran jugada en el área, que Cortés bien supo despejar con los pies. Esta salvada, junto con un par más, confirman la consolidación del arquero “albo” bajo los tres postes, siendo un punto destacable dentro de la desastrosa y épica temporada del “Cacique”.
El partido no dio para mucho más, salvo una decisión del VAR intrascendente, a favor de Colo-Colo. El “Campanil” lo buscó casi sin ganas, casi como si no hubieran querido mantenerse en primera. O tal vez, los nervios se los comieron, al enfrentarse a la posibilidad de jugarse la permanencia contra el tal vez más grande equipo en la historia del fútbol nacional.
Por otro lado, la radiografía del cuadro “popular” de la temporada es terrible. Se hicieron las cosas mal desde el primer día, entrando en conflicto el primer equipo con la dirigencia por temas de sueldos, negándose a participar de los entrenamientos por diferencias salariales, en tiempos de pandemia. Más adelante en la temporada, se presentaron refuerzos que esperanzaron a la hinchada “alba”, entre los que destacan el “peluca” Falcón, y el argentino Solari, de solo 19 años, quien, en la épica jornada jugada, fue el héroe máximo, echándose 95 años de historia “alba” en la espalda, desenvolviéndose con magia en un también épico golazo que quedará marcado en la retina de todo hincha colocolino.
Por otro lado, otros jugadores no rindieron lo esperado, entre el eterno lesionado Blandi, los peleados con la directiva Insaurralde y Mouche, y el que quizás deja un sabor más amargo, Matías Fernández. El ídolo “albo”, de místico pasado en el equipo del 2006, que recordaremos por siempre como quizás el Colo-Colo más vistoso de todos los tiempos, en donde Matías fue quizás el más especial, con una pegada exquisita y un alma de niño tímido pero hermosamente impredecible. Queda poco por no decir nada de eso. Matías no rindió cómo el hincha colocolino ha añorado. Será por indisposición del jugador, por desmotivación, porque no están las condiciones para replicar ese desempeño, no está la confianza puesta en él, quién sabe, tal vez ni él lo sabe. Lo que se está hablando en estos momentos es que Matías deja el cuadro “albo”, y no sé a quién señalar; si al dirigente “albo” Aníbal Mosa, al mismo Matías, no sé, solo sé que es una pena para todo hincha “albo” que añora hasta tenerlo en cancha vistiendo la camiseta blanca, esperando con paciencia ejemplar al menos un destello de lo que Matías fue, un momento en donde vuelvan a encontrarse con ese rebelde y chascón Matías, por allá por el 2006.
Finalizado el campeonato nacional, Colo-Colo se salva en el último partido del torneo, y la Universidad de Concepción, tras irregulares temporadas, pierde la categoría. El “Campanil” entró en este partido por ser el penúltimo en la tabla ponderada, confirmando un mal desempeño general en las últimas dos temporadas. Suspiran los hinchas “albos” y sufre desconsolada la hinchada “auriazul”, quienes, a pesar de tener buenas individualidades, como Waterman, se tendrán que conformar con la Primera B, al menos por la siguiente temporada. Además, el otro equipo grande de la zona, Deportes Concepción, también descendió, a la Tercera División A, por lo que les queda un duro presente a la gente de la Región del BíoBío, quienes tendrán que levantarse y reestructurar sus planes deportivos a futuro, para poder volver a entregarle una sonrisa a su gente.